Zoológicos humanos en Europa: origen y controversia

Un zoológico humano es una exhibición pública de seres humanos, típicamente aquellos percibidos como primitivos o salvajes. Estas exhibiciones eran habituales a finales del siglo XIX e inicios del siglo XX en Europa, durante el periodo conocido como nuevo imperialismo, y con frecuencia afirmaban la supremacía de las personas europeas.

Cuándo fue el primer zoológico humano

El origen de los zoológicos humanos puede datarse en la Antigüedad y el Medioevo, en los palacios reales y los espectáculos de circo. Sin embargo, su establecimiento como lugares de muestra de personas no europeas para un público de masas se inició en la década de 1870 con Carl Hagenbeck, quien organizó exhibiciones humanas en el Jardín de Aclimatación de París. Estas exhibiciones continuaron hasta principios de la década de 1930, siendo la última destacada la de la Exposición Mundial de Bruselas de 195

Los primeros zoológicos humanos

Uno de los primeros antecedentes de los zoológicos humanos fue la colección de Moctezuma en México, la cual incluía tanto animales como personas consideradas poco comunes. En el siglo XVI, el cardenal Hipólito de Médicis tenía una colección de personas de diferentes etnias. Sin embargo, los zoológicos humanos se volvieron comunes a mediados del periodo del Nuevo Imperialismo, a finales del siglo XIX.

Hubo exhibiciones de seres humanos en la antigua Roma, donde eran traídos amarrados e incluso en jaulas por los generales victoriosos. Uno de los ejemplos más conocidos es el de Sara Baartman, la Venus hotentote, una mujer de la nación sudafricana joisán que fue exhibida en Londres a principios del siglo XIX.

Pueblos indígenas de Sudamérica en zoológicos humanos

En los zoológicos humanos también fueron exhibidos pueblos indígenas de Sudamérica. Por ejemplo, en 1881, once fueguinos fueron exhibidos en el Jardín de Aclimatación de París. En septiembre de ese año, fueron llevados desde Tierra del Fuego por Johann Wilhelm Wahlen, un marino alemán. Durante su exhibición, se los presentaba como caníbales y se les mantenía en condiciones inhumanas.

En el caso de los mapuches, en junio fueron exhibidas dos familias en el Jardín de Aclimatación. Fueron llevados hasta el lugar por el alemán Richard Fritz, y durante la exposición se enfatizaba su cultura a través del juego del palín y el uso de sus instrumentos.

Zoológicos humanos en España

En España también se realizaron exposiciones de personas no occidentales. La primera de ellas se llevó a cabo en 1887 en el Parque del Retiro de Madrid, donde se exhibieron personas filipinas. Estas exposiciones continuaron en años posteriores en Barcelona y Madrid, incluyendo personas de diferentes etnias.

Hasta 1997, el Bosquimano de Banyoles, un hombre africano embalsamado, se encontraba expuesto en el Museo Darder de Girona.

Zoológicos humanos en la actualidad

Aunque los zoológicos humanos dejaron de ser comunes después de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, han existido algunas formas de exhibición de personas con fines de investigación o entretenimiento. Por ejemplo, en 2005, el Zoo de Londres exhibió a participantes voluntarios desnudos como parte de un estudio. En 2007, el Zoo de Adelaida realizó un experimento en el que un grupo de personas simulaban el encierro de un primate durante el día.

En los últimos años, ha habido una revisión crítica de los zoológicos humanos, destacando su dimensión colonial y de deshumanización. Se han realizado exposiciones y obras de teatro que abordan esta temática desde una perspectiva antirracista.

Los zoológicos humanos fueron exhibiciones públicas de seres humanos considerados primitivos o salvajes. Aunque tuvieron su origen en épocas antiguas, se volvieron comunes durante el periodo del Nuevo Imperialismo en Europa. Afortunadamente, este tipo de exhibiciones ha dejado de ser aceptado debido a su carácter inhumano y discriminatorio.